Sobre brechas y catedrales.
Motivos para que los cambios que precisa nuestro sistema sanitario sean lentos y heterogéneos hay varios.
Llevo varios días dando vueltas a uno que me preocupa en particular. Es el gap o brecha que parece existe (digo parece porque son impresiones personales) entre la clase política, la administración, la alta dirección de las organizaciones sanitarias, los cargos intermedios, los profesionales y los pacientes.
Pienso que conforme nos alejamos más del objeto de nuestro cuidado -las personas-, el riesgo de que la realidad se distorsione o nos la distorsionen es más elevado. Me preocupa.
También, porque desde hace unos meses, me agobia que el ocupar un puesto de responsabilidad directiva, me aleje de las necesidades de las personas. Confieso esta inquietud porque creo que hay que ponerle remedio.
Y no se me ocurre otra mejor manera que contar con los #pacientes, para que ellos nos digan, desde su experiencia, si verdaderamente infundimos confianza en las cosas que hacemos con ellos día a día.
Como cuando en la clínica, utilizamos un razonamiento basado en la evidencia científica, está claro que la medición de los #resultados en salud y la evaluación de la #experiencia de nuestros pacientes, me parecen cada vez elementos más claves para que nos demos o no, un baño de “realidades”.
Pongo una mirada en mi amigo Carlos Bezos Daleske porque me ha calado hasta los huesos con todas las cosas que está haciendo en el Instituto para la Experiencia del Paciente IEXP y no estaría mal (no tengo ningún conflicto de intereses que declarar) que tomáramos buena nota de como hacen allí para medir, evaluar y “dar una respuesta científica” a esta duda que me corroe últimamente y me quita el sueño.
Este ejercicio no estaría completo, sin tener en cuenta, como proponen algunos, el meter en la ecuación, en la cuarta meta, la opinión de los profesionales. Agradecería que, desde una posición constructiva, fueran ellos también los que nos dijeran cómo lo ven y que podemos hacer juntos, para mejorar y para seguir creciendo.
Hoy además por Fernando Abadía Badenas me ha llegado un podcast que me ha dejado inquieto: “Pensamiento Catedral” de Jaime Rodríguez de Santiago. El autor habla de la visión infinita y de futuro que tuvieron los constructores de las catedrales en el diseño de estas estructuras y de que no estaría nada mal que recuperáramos esa visión a largo plazo en algunas empresas que tiene por delante la humanidad. En seguida me ha venido a la mente la mía, la nuestra, la sanidad y nuestro querido sistema. Recuperar esa visión de liderazgo infinito, de la que también habla Simon Sinek, me parece otro elemento que añadir al análisis.
Cambiar es continuidad, coherencia, no alejarte, recibir información veraz y valorar el papel relevante que deben de jugar los profesionales y sobre todo los pacientes, en la mejora de nuestras acciones.
Esperemos que esta noche, pueda recibir consuelo de Morfeo.
Mañana más tarea.
